Residentes fronterizos y miembros de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos (BNHR) marcharán cien millas desde el sur de Nuevo México hasta el oeste de Texas y participarán en otras acciones en rechazo al despliegue de la Guardia Nacional en la frontera.
La caminata se llevará a cabo del 21 al 24 de agosto y entre sus objetivos se encuentra el de exigir tanto al gobernador de Texas, Rick Perry, como al presidente Barack Obama atender el tema migratorio desde una perspectiva humana y realista en vez de hacerlo de forma policial y partidista.