La máxima autoridad religiosa chií, Ali al Sistani, avisó hoy a los políticos iraquíes del "error" de aferrarse a sus cargos, en una clara advertencia al primer ministro del país, Nuri al Maliki, también chií, que insiste en mantenerse al frente del Gobierno.
"Aferrarse a los cargos, sean cuales sean las consecuencias y los efectos negativos, es un tremendo error.
Debemos evitar a cualquier político que lo haga, al margen de su responsabilidad", dijo en el sermón de la oración del viernes el jeque Abdelmahdi al Kerbalai, representante de Al Sistani.