Casi medio siglo después, sir Paul McCartney volverá a tocar, esta vez en solitario, en el estadio de San Francisco en el que los Beatles dieron su último concierto oficial, en 1966. Además, será el último evento que se celebre en este espacio antes de que sea demolido.
Este jueves, a las ocho de la tarde (PT), McCartney regresará por primera vez en 48 años al Candlestick Park de la ciudad californiana para deleitar a un público que lo espera entusiasmado, ya que, cuando se pusieron a la venta las entradas (a un precio de entre 50 y 255 dólares; entre 37 y 190 euros), se agotaron en sólo dos horas.